Un gran operativo policial fue desplegado en la capital danesa
Dos personas han muerto y otras cinco han resultado heridas en dos tiroteos separados por horas y ocurridos en un centro cultural y cerca de una sinagoga de Copenhague que el Gobierno ha calificado de “terroristas”.
La Policía danesa ha revelado a primera hora de la mañana que ha matado a un hombre cerca de la sinagoga atacada. “Nuestra hipótesis es que se trata del autor de los dos tiroteos en Copenhague“, ha señalado en rueda de prensa el inspector Jørgen Skov, que apuntó que nada indica que contara con ayuda y que se mantendrá la presencia “masiva” de agentes en el centro de la capital danesa.
El primer tiroteo sucedió el sábado por la tarde en un centro cultural donde se debatía sobre la blasfemia y la libertad de expresión. Según los testigos se dispararon entre 30 y 40 tiros en este ataque, en el que ha reultado muerto un civil de unos 40 años y heridos de levedad tres agentes, dos de ellos de los servicios de inteligencia.
Las autoridades calificaron este caso de atentado terrorista, de ahí que fuera elevado al máximo la alerta en la capital danesa, aunque no está confirmado que el objetivo fuera el artista sueco Lars Vilks, presente en la sala en la que también estaba el embajador de Francia en Dinamarca.
Vilks vive con protección policial por las amenazas de grupos islámicos tras caricaturiza a Mahoma como un perro en un diario en 2007.
Segundo ataque en una sinagoga
Horas después, ya entrada la madrugada del domingo, un tiroteo cerca de una sinagoga ha causado la muerte de otro civil y heridas a dos policías en una pierna y un brazo, según ha declarado Allan Teddy Wadsworth-Hansen, de la policía de Copenhague. En una conferencia de prensa ha precisado que los agentes están fuera de peligro.
La víctima es un joven judío. “Era un miembro de La Sociedad Judía en Dinamarca y estaba haciendo un control de entrada junto a la sinagoga en la calle de los Cristales porque había una confirmación judía”, ha declarado al canal TV2 News Dan Rosenberg Asmussen, portavoz de esa asociación.
El atacante no logró entrar en el interior del edificio, situado en el centro de Copenahgue. “No me atrevo a imaginar lo que podría haber ocurrido si hubiera entrado en la comunidad”, dijo Asmussen, quien se a mostrado “conmocionado” y ha trazado paralelismos entre el incidente y los atentados de enero pasado en París.