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Actuar como grosero, es pretender para si todo. No solo al comer.
Se exhibe grosería en algunos comunicadores de San Pedro de Macorís que se creen ser dueños del espectro periodístico local en el ámbito televisivo, radiofónico o escrito. Por tal causa muchos talentosos comunicadores local hemos optando por emigrar a Santo Domingo, Capital del país o al exterior.
Cierto grupito de elite rancia ha frustrado el sueño de muchos nativos y emigrantes… son mediocres que sienten temor por los que le hacen sombra.
Los tales en sus adentro sienten un vació existencial.
No encuentran como dejar de dañar. Pululan en sus soledades internas procurando saciar sus complacencias absurdas de disfrutar tratando de al otro tronchar.
Ojala los de pudor, no se traten de vengar de esos inmundos que deben ser vistos con penas. Están preñados de resentimientos.
Aparentan ser ovejas pero, son lobos hambrientos de morder el derecho que les asiste a los demás de progresar en un clima de igualdad de condiciones y derecho. Las actuaciones de exclusión, refleja lo que reposa en el corazón.
La calidad de actuar depende de lo que en la mente hay.
El espíritu avasallador y ambicioso no se manifiesta en todos los que pululan los medios y demás ambiente. Existen algunos que no son egoístas pero, se mantienen ambivalente ante los que se rigen con tal insaciabilidad.
Esos que no practican esas artimañas ven sin preocupación a los que actúan como tal.
Fomentando sutilmente esta mala forma que también se ejecuta en algunas en algunos grupitos de supuestos cristianos ¿?.
Quien ve cometer un crimen sin hacer nada para evitarlo es compile. José Martì.
La sociedad de San Pedro de Macorís debe ceder espacios ha los relevos generacionales. ¿Cuándo terminara la mezquindad? Dios sabrá.
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