Todo lo puedo en Cristo que me fortalece (Filipenses 4:13

Todo lo puedo en Cristo que me fortalece. -Filipenses 4:13

Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente: no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios será contigo en donde quiera que fueres. Josué 1:9

Periodista Cesáreo Silvestre Peguero, editor de este portal Web.

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domingo, 27 de enero de 2013

Alta desigualdad concentra la riqueza en 23% de la población




6 % es dueño de casi todo, el 16 % restante; de lo que queda
Éramos un país descalzo.  Más de medio millón de pies al aire apisonando la tierra de los amos, unos cuantos criollos y extranjeros con calzado parisino, leontina y bastón con puño de oro pregonando el linaje, como el Ford frente a sus casonas coloniales, símbolos de la desigualdad, de la histórica exclusión social que arraiga y se engarza en el tiempo, y que un siglo después, en 2012, se cobrará un alto precio: la paz social.

Eran pocos, un puñado de importadores y exportadores, terratenientes que con la ley o la trampa se fueron apoderando de los terrenos comuneros, los ricos del primer decenio del siglo XX, cuando República Dominicana era  una nación pobre, muy pobre, con una pobreza sumisa, resignada, que entendían obra de Dios y no del hombre, algo natural y no fruto del despojo, de la acumulación facilitada por leyes, decretos y otras artimañas que, como ocurriría después, legalizaban la apropiación desmedida.

Calzapollos.  Al mediar la centuria, ni la Fadoc con sus rústicos y torturadores zapatos de uso compulsivo logró calzar gran parte de los pies desnudos o con “calzapollos”, alpargatas de neumáticos que a la población campesina, casi el  90% en 1912, protegían de las niguas y la parasitosis, que hacían estragos.  Gente muy pobre, jornaleros y peones ajenos a la “danza de los millones”, en los años veinte, a la lluvia de dólares que desde 1945 nos volvía a traer el azúcar junto al café y el  cacao en la posguerra.

Desigualdad y pobreza caracterizaron la tiranía de Rafael L. Trujillo, dueño y señor del país, el único que podía acumular riquezas, y  los ricos de siempre  a los que no había expropiado, gente de alcurnia con sus Cadillac y Chevrolet, mansiones y chalés que marcaban su estatus.

Nadie más podía empotrarse en la cima de la pirámide social, adonde se enquistó una veintena de familias que se apoderaron del patrimonio trujillista tras caer el tirano, iniciándose cambios en la estructura económica y la estratificación social.  Despuntó la clase media, se adoptaron nuevos patrones en la generación del ingreso y en  el consumo.  Por el contrario,  la concentración de las riquezas en pocas manos siguió siendo una constante.

Justo en 1961, los parámetros internacionales nos encasillaron en la categoría de país pobre, el número tres entre los más empobrecidos de América Latina. A fuerza de crecer dimos el salto. La economía se expandió y en  2007 nos declararon país de ingresos medios, posición consolidada en el primer decenio del siglo XXI.   ¡Ya no somos pobres! Torres, elevados,   villas con sus marinas y campos de golf lo atestiguan.

¿Que ya no somos pobres? Y esos arrabales urbanos, y esa gente famélica  en  campos y bateyes, y esa miseria en El Valle, Enriquillo y el Cibao Noroeste, las zonas más deprimidas con tasas de pobreza en 2011 de 53.9%, 53.8% y 50.8%, respectivamente?

Dimensiones dramáticas.  El crecimiento económico generó cuantiosas riquezas. Sin embargo, nunca como ahora la endémica desigualdad  había aflorado tanto, nunca la pobreza había tenido dimensiones tan dramáticas, aristas tan cortantes, afiladas por la exclusión.  De US$1,232 en 1961, el ingreso per cápita se remontó a US$5,218 en 2011. Pero de ese promedio, el 10% más rico acapara 37 veces más que el 10% más pobre.

El país comenzó a transitar el siglo XXI con un Producto Interno Bruto (PIB) de US$23 mil millones en el año  2000, el cual subió a RD$55 mil millones en 2011, más que duplicado. Al mantenerse los mismos patrones en la concentración de la renta, las riquezas volvieron a fluir hacia la cúspide, un 6% de la población, también al 17% de clase media alta. 

 En total 23% beneficiado con  alrededor del 60% del  ingreso nacional,  entre ellos los nuevos millonarios en dólares que se apropian del patrimonio estatal, políticos corruptos que saltaron de la base a la cima de la pirámide social, los catapultados por el narcotráfico, el contrabando, el tráfico humano. Disfrutan del festín, de las riquezas producidas por todos pero distribuidas con gran  inequidad.

Más pobres.  En términos absolutos y relativos, en 2012 hay más pobres que en el 2000. Y es que la pobreza se dispara en tiempos de crisis, como  2003, que subió al 42%,  pero baja muy poco y lentamente en tiempos de bonanza, como 2005, 2006 y 2007. 

Similar comportamiento se evidenció de 1997 a 2000, años en que el PIB creció a una media de 6% y la pobreza solo bajó un punto.

¿Por qué? Es obvio, los  estratos bajos soportan el mayor rigor de los  ajustes para enfrentar las crisis, sobre ellos recae la inflación, la carga impositiva,  el peso de la deuda.  Por eso, todavía en 2010 el índice de pobreza se mantenía en 33.2% de la población, seis puntos porcentuales por encima de la tasa del 2000, de 27.2%.

 Supera incluso la proporción de hogares pobres en 1977,  de 23.3%, frente a  26.2% en la actualidad.

En 2011, con una tasa de 31.6%, había más de tres millones de  pobres, 867,562 en indigencia. Pero de hecho medio país está en la pobreza. Difícilmente pueda excluirse de esa condición a una amplia franja con ingresos que apenas superan la línea de pobreza.

 En 2008, frente a una tasa oficial de 35% en pobreza, la clase baja dominicana  fue cifrada en 47% de la población y los indigentes  10% por el Gain Report: Dominican Republic Guide.    Además de no mostrar la desgarradora dimensión humana, las estadísticas difieren según la metodología empleada, también al ser barnizadas, manipuladas. Mientras, un   23% vive   en un mundo privilegiado, un país aparte, ajeno a la suerte del otro país, el degradante mundo de los pobres, una realidad cercana pero  a la vez distante, ignorada,  rechazada.

 Mantiene validez el juicio del padre Jorge Cela:   “La gran mayoría del 20% más rico no tiene ni idea de cómo vive el 20% más pobre”. 

Los ignoran. Y si miran hacia los barrios, es porque hacia esos arrabales apunta el dedo acusador ante el desborde de    la delincuencia y la criminalidad. La violencia  les perturba, impide el goce pleno de sus teneres, disfrutar del paraíso que en playas y montañas  se edificaron.

Un nuevo perfil.   La pobreza persiste, masificada, degradada, hechura de asimetrías sempiternas, de la falta de oportunidades, de carencias extremas. Se enraiza, y no por falta de recursos. Creamos riqueza pero no hemos tenido buenos administradores, faltó pulcritud, sobró inequidad.  Y en años de exclusión, migraciones y desalojos,   vejaciones y frustraciones, la pobreza se fue configurando como un fenómeno  con facetas distintas:

Una pobreza sin esperanza que cada día se  somete a violencia que implica su mísera existencia. También una pobreza  de intrincados encadenamientos con la delincuencia,  tráfico de drogas,  prostitución.

No somos ya un país descalzo. Estamos calzados, pero todos, ricos y pobres,  vamos armados,  tenemos miedo.

Antecedentes

Crecimiento del PIB y pobreza

1969-1976.  El crecimiento del PIB a un 10% anual en 1969-1976  acrecienta el poder de los grupos económicos tradicionales y consolida la clase media, pero no eleva la calidad de vida de los pobres. A la élite económica y social,  5% de la población, se suman los nuevos ricos, políticos y militares balagueristas,   industriales  lucrados con  exenciones impositivas y otros incentivos. Según   Enigh 1976-1977, encuesta del Banco Central,   la pobreza arropa al  23% de los hogares.

1996-1999

Tras la crisis de los 80, la economía se recupera a mediados de los 90, el PIB crece a un promedio anual de 8% en 1996-1999, pero  la riqueza vuelve a subir a la cúspide. La holgura financiera no se aprovecha para saldar la enorme deuda social, el  proceso de modernización y privatización propicia mayor concentración de la riqueza, amplía la brecha  entre mendicidad y opulencia. En 1998 Enigh III confirma la desigualdad:  el 10% más rico de la población recibe el 37.4% del ingreso nacional y el 10% más pobre apenas 2%.

2005-2012 

La tasa de pobreza sube a  42% con la crisis financiera de 2003, baja ligeramente con la recuperación económica, al crecer el PIB  en   2005, 2006,  2007 y 2008  al 9.3%, 10.7%. 8.5% y 5.3% anual, respectivamente. La reducción de la pobreza se desacelera desde 2007 y todavía en 2010  el país tiene 747,650 hogares pobres, con un  total de 3.23 millones de personas. En 2010 el PIB creció a 5.5%, y en 2011 al 4.5%, proyectándose para 2012 un 4.4%

La pobreza rural en la República Dominicana


Según los últimos datos oficiales de pobreza, más de un tercio de la vida de la población total del país en la pobreza y casi el 20 por ciento vive en la pobreza extrema. En las zonas rurales, los pobres constituyen la mitad de la población. 

¿Quiénes son los pobres del país y dónde están? 

La población rural pobre son las mujeres y los hombres que son jefes de familia, los pequeños agricultores, campesinos sin tierra, microempresarios, pequeños comerciantes, trabajadores agrícolas y trabajadores de los operadores de servicios rurales. Los más pobres entre los pobres son los dominicanos de origen haitiano que viven en las zonas fronterizas. Son especialmente vulnerables y sufren no sólo de ingresos bajos y malas condiciones de vida, sino también de exclusión social. En todos los grupos, las mujeres que son cabeza de familia y los niños son extremadamente vulnerables. Debido a que carecen de la debida documentación, como certificados de nacimiento y documentos de identidad, alrededor del 20 por ciento de las familias más pobres dominicanos no se benefician de la mayoría de los programas de asistencia social.

Los índices más altos de pobreza y pobreza extrema se producen en las regiones fronterizas dominico-haitianas y sobre todo en las zonas montañosas y en los valles más bajos donde existe una alta concentración de barrios de tugurios, llamado bateyes, se establecieron los dominicanos extremadamente pobres de origen haitiano y migrantes los trabajadores temporeros procedentes de Haití que trabajan en las plantaciones de caña de azúcar.

¿Por qué son pobres?
La persistencia de la pobreza rural es el resultado de varios factores, como prioridad del Gobierno la posibilidad de desarrollar los sectores del turismo, la industria y los servicios durante la última década. La productividad agrícola es baja, y la inversión pública en el desarrollo social y productivo en las zonas rurales es limitado. Las crisis naturales como los huracanes y las tormentas tropicales son una amenaza recurrente a las zonas rurales ya las condiciones de vida y los ingresos de la población rural.

Los agricultores pobres del país tienen poca tierra y su producción es demasiado bajo para que puedan mantener a sus familias. Un gran número de agricultores de subsistencia a pequeña escala y sus familias tienen que buscar empleo no agrícola u otra actividad generadora de ingresos para complementar los ingresos familiares. En la República Dominicana, como en muchos países de América Latina, los hogares rurales extremadamente pobres dependen cada vez más para su supervivencia de ingresos no agrícolas, además de los ingresos de la agricultura.

La baja productividad agrícola es un factor crucial en la pobreza rural. Aunque la tecnología está disponible y se sabe que algunos agricultores, la falta de acceso a los recursos financieros y los sistemas de extensión impiden a los agricultores la adopción de las tecnologías que necesitan para mejorar su producción y sus ingresos.

Sin embargo, el perfil de la agricultura está cambiando, y los grupos de pequeños agricultores están cosechando los beneficios de las tecnologías mejoradas para incrementar la producción de cultivos de exportación de hortalizas como fuente de ingresos adicional. En colaboración con el Gobierno, el FIDA y otros socios contribuir a la diversificación de los agricultores y al empoderamiento de los grupos e instituciones, con el objetivo de ayudar a desarrollar nuevos mercados.

Fuente: FIDA 

Periódicos digitales se convierten en los medios por excelencia en la RD


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SANTO DOMINGO.- El hecho de que más de dos millones de dominicanos tengan en estos momentos acceso al internet, y de que se estén multiplicando en todo el país los centros en los que el público puede tener acceso a este servicio, está convirtiendo a los periódicos digitales en los medios por excelencia en la República Dominicana.
Según la Comisión Nacional Para la Sociedad de la Información y el Conocimiento (CNSIC) en este país un total de 2.2 millones de personas, equivalentes a un 23.8% de la población, tiene acceso a la red mundial  y hay mas de 290 mil cuentas en sus diferentes modalidades de conexión.
"Cada vez hay más y mas cuentas de Internet residencial, lo que implica que cada vez mas dominicanos se involucran en el uso del Internet para sus asuntos personales, estudiantiles y profesionales", dice José Rafael Vargas, presidente de dicha comisión y del Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones.
El avance acelerado del internet y el surgimiento de numerosos periódicos digitales y páginas comerciales o personales, ha puesto prácticamente en jaque a los periódicos escritos en papel, los cuales tienen cada vez menos lectores en la República Dominicana.
"Yo estaba suscrito a un periódico matutino tradicional, cuyo nombre me abstengo de señalar por razones éticas.  Me pasaba hasta semanas y no lo leía porque cuando llegaba ya todas sus noticias para mí eran viejas, ya que me había enterado de las mismas a través de los medios digitales", dice Juan Augusto Valdez, un licenciado en administración de empresas.
Agrega que él optó, en consecuencia, por suspender la suscripción de ese periódico, a pesar de los "ruegos" que representantes del Departamento de Circulación de dicha empresa le hicieron para que mantuviera la misma.
Otro profesional, Rafael Martínez Gil, dice que él se siente más cómodo leyendo las noticias por internet que en un periódico de papel, pues con sólo dar clics en forma sucesiva navega de un medio a otro en cuestión de minutos.
Mayores presupuestos
Como ocurrió en los Estados Unidos y otros países, una parte considerable de las empresas está destinando presupuestos anuales para anunciarse en internet, bajo el entendido de que este medio llega más al público que la prensa escrita, la radio y la misma televisión.
"Yo regularmente cuando estoy en mi oficina tengo abierto un periódico de internet que publica noticias al instante de producirse.  Cada vez que puedo, a lo largo del día, entro al mismo y me entero de lo que está ocurriendo, y fundamentalmente de los chismes de nuestros políticos", declaró Vanesa Santana, quien labora en una oficina privada.
Más penetrantes que las vallas
Los periódicos digitales dominicanos están, también, poniendo en peligro a las empresas propietarias de vallas publicitarias, en razón de que numerosos "encargados de medios" de agencias de publicidad han llegado al convencimiento de que su mensaje llega más a través de un periódico digital, que se ve en el mundo entero.
Y ciertamente, una valla es vista de manera rápida, como si fuera un flash, por unos cuantos automovilistas o pasajeros quienes regularmente están entretenidos en otra cosa, y sin embargo en un periódico digital el mensaje es más penetrante y duradero, y como tal es capaz de causar efectos más sugestivos.
Autor: Saúl Pimentel

Después de la tempestad siempre llega la calma


Después de la tempestad siempre llega la calma → esperanza optimismo esperanza positiva ser positivo enpositivo vivir en positivo El decálogo de Eduardo Punset para la esperanza.
Eduard Punset ha encontrado a través del tiempo y de los múltiples estudios que ha llegado a realizar que debemos tener esperanza en los tiempos venideros. Que después de la tempestad siempre llega la calma y que la noche es más oscura antes del amanecer.
Este es su decálogo para no perder la esperanza en nosotros mismos y seguir adelante pese a las múltiples dificultades que nos encontremos en nuestro camino.
Después de la tempestad siempre llega la calma → esperanza positiva Punset eduardo punset esperanza optimismo 300x211
Aprendamos de Eduard Punset:
1. La esperanza de vida sigue aumentando desde el siglo pasado unos dos años y medio cada década. No hacemos ninguna manifestación para celebrarlo, pero debiéramos.
2. Gracias a lo anterior, la gente puede estar menos obsesionada de lo que estaba antes con saber si existe vida después de la muerte; le importa hoy, muchísimo más, constatar que hay vida antes de la muerte.
3. Las políticas de prevención son más importantes y debiéramos dedicarles más tiempo que a las políticas de curación. Básicamente, lo que esto quiere decir es que debiéramos hacer regularmente ejercicio físico, cuidar nuestra dieta y saber disfrutar de todo lo que tenemos, y no solo llorar por lo que no tenemos.
4. La introducción del aprendizaje social y emocional en el sistema educativo no podemos retrasarlo ni un año más. Para ello hace falta preparar a los educandos para que conozcan las emociones positivas y las negativas y nos ayuden a gestionarlas.
5. Podemos contribuir a la solución de muchos de nuestros problemas deslindando lascompetencias negativas, que retrasan la hora de encontrar empleo, de las competencias positivas, que lo aceleran. Entre las primeras está el desconocimiento de las emociones –a ver si aprendemos de una vez lo que significa el desprecio de las demás– y entre las segundas, que la felicidad está en la sala de espera de la felicidad.
6. Es hora de constatar la importancia de la intuición y lo que nos dice el inconsciente en contraposición con el llamado «pensamiento racional y consciente». No me olvido nunca de la señora que, llorando, me paró en la calle para darme las gracias por haber sabido devolverle la confianza en la intuición, que los demás habían intentado segarle durante toda su vida.
7. El conocimiento de las verdaderas dimensiones de la felicidad ha sido la gran conquista del siglo XX. Hemos aprendido que no es necesariamente el dinero lo que confiere dicha felicidad. Cuando se vive por debajo del nivel de subsistencia, el dinero es la felicidad; pero una vez alcanzado este nivel, la dimensión más correlacionada con la felicidad es el control de la propia vida. Tener la impresión de que lo que uno hace sirve para algo.
8. La belleza, que tanta gente busca, es la ausencia del dolor. Pero demasiada gente está dispuesta a soportarlo sin razones evidentes por la consecución del sueño o trabajo que a uno más le gusta. El ejercicio o el trabajo sin dolor es aumentar su conocimiento hasta saber controlarlo.
9. La manada –cuando tiene que atravesar un río o subirse a la montaña– siempre busca a los jóvenes. El gran problema del próximo siglo será la redistribución del trabajo y no de la riqueza. Las escuelas, los sindicatos, las empresas nuevas debieran haber iniciado ya el estudio y la aplicación de este principio. En el Estado, las demás instituciones sociales y las empresas se deberían abrir las puertas a la juventud, que sigue marginada.
10. Por favor, ya es hora de renunciar al dogmatismo y aceptar el principio de incertidumbre como práctica cotidiana. Cuando se intuye algo, es preciso comprobarlo y, si funciona, aplicarlo hasta que alguien más venga a demostrar lo contrario. Newton convenció a medio mundo de que el tiempo era igual para todos, de que era absoluto. Luego vino Einstein y dijo que el tiempo es relativo; distinto en función de la masa física que lo sustentaba y de su velocidad.

Las ventajas de la empatía


Las personas y la empatía.

Las ventajas de la empatía → empatia ser empatico conectar
Recientes investigaciones señalan que la empatía es un hábito que puede ser cultivado para mejorar la calidad de vida y radical transformación social.   La ciencia comprende que somos homoempathicus - pese a la consideración generalizada del ser egoísta – y por tanto en nuestra naturaleza se dispone la cooperación social  y ayuda mutua.
Tal y como afirmó el célebre dramaturgo George Bernard Shaw “No hagas a los demás lo que no te gustaría que te hicieran a ti – ellos podrían tener gustos diferentes”. Así la empatía no se limita a ponerse en el lugar del otro para entender sus sentimientos y punto de vista, sino que trasciende en descubrir sus preferencias.
Las personas estamos preparadas para la empatía en los dos primeros años de existencia bajo el influjo de fuertes relaciones de apego. Sin embargo esta virtud puede y debe ser desarrollada a lo largo de la vida contribuyendo a nuestro éxito y el de los que nos rodean.
¿Cómo potenciar la empatía?
  1. Hablar con extraños: la gente sumamente empática (las siglas en inglés HEPS) alberga la curiosidad de un niño y encuentra al resto más interesante. Su interés por la naturaleza humana les invita a conversar con extraños, expandirse y conocer personas con visiones muy diferentes aprovechando cualquier situación cotidiana.
  2. Desafiar prejuicios y descubrir puntos comunes: las HEPS se alejan de una concepción del mundo plagada de clichés e ideas preconcebidas. Adquieren un espíritu independiente al tiempo que tolerante a la búsqueda de compartir con la gente en lugar de destacar los aspectos que los dividen.
  3. Probar la vida de los otros: nos educamos en conocimiento y este deviene de la experiencia: probar y equivocarse. Siempre es positivo asistir a ritos religiosos diferentes al nuestro, pasar unas vacaciones como voluntario en un país en vías de desarrollo…toda acción enriquece al humanista.
  4. Escuchar y abrirse: una persona con alta empatía no duda en escuchar sinceramente a los demás y hace todo lo posible por comprender su estado emocional.  También vive desprovista de máscaras y revela sus sentimientos, así crea un vínculo empático con los demás. El Círculo de padres palestino-israelí lo comparten reuniendo a familiares de las víctimas de ambos lados del conflicto para conocer, escuchar y hablar.
  5. Inspirar la acción de masas y cambio social: una actitud empática puede movilizar conciencias para una revolución social. Ejemplos como la preocupación global por las víctimas del tsunami asiático de 2004  así lo atestiguan. También programas educativos, tal es el caso de Roots of Empathy en Canadá, que se benefician de la inteligencia emocional para favorecer el buen clima en sus aulas y mayores logros académico. Las redes sociales pueden ser el futuro de la conexión empática.
  6. Desarrollar una ambiciosa perspicacia: aplicar la empatía con los enemigos a modo de “empatía instrumental” al igual que Gandhi en su resistencia no violenta. También afecta al área empresarial para dominar los constantes cambios con el respaldo de un buen liderazgo.
A qué esperas para salir al encuentro con los demás y comprobar por ti mismo las ventajas de la empatía.