En días recientes, las aguas normalmente azules del Bósforo, el estrecho que separa a Europa de Asia, sorprendieron a los habitantes de Estambul por su intensa coloración turquesa.
Alarmados, muchos residentes de esta ciudad turca expresaron su temor en las redes sociales, donde se preguntaban si el fenómeno podría deberse a la contaminación.
Algunos incluso lo vincularon a un terremoto que sacudió la región el lunes.
Sin embargo, según científicos, el cambio en la tonalidad -acompañado de olor potente- responde a una causa muy diferente: se debe a un incremento repentino de una especie de fitoplancton en el mar Negro.
El fitoplancton está formado por organismos microscópicos flotantes que producen su propio alimento a partir del sol y nutrientes disueltos en el agua.
Y, las aguas que llegan al Mar Negro de ríos como el Danubio y el Dniéper, aportan gran cantidad de nutrientes.
"Bendición"
En este caso, la especie de fitoplancton presente es la que se conoce como Emiliania huxleyi, dijo el profesor de ciencias ambientales Ahmet Cemal Saydam, de la Universidad de Hacettepe, a la agencia de noticias local Dogan.
Derechos de autor de la imagenGORDON TAYLOR, STONY BROOK UNIV.Image captionLa Emiliania huxleyi aclara el color de las aguas, pero en cambio, si el microorganismo presente es la diatomea, el agua se oscurece.
"Esto no tiene nada que ver con la contaminación. En todo el mar Negro hay una explosión de Emiliania huxleyi. Esto es una bendición para el mar Negro", aseguró el experto, quien explicó que este microorganismo es bueno particularmente para las anchoas, un alimento muy popular en Turquía.
El fitoplancton, por lo general, es beneficioso por el alimento que aporta a los peces, mariscos y otros organismos marinos.
Sin embargo, cuando hay demasiado, puede provocar una pérdida de oxígeno en el agua y, como resultado, puede sofocar la vida marina.
Desde el espacio
El cambio de coloración es tal que incluso se observó desde el espacio.
Derechos de autor de la imagenNASAImage captionLas imágenes satelitales muestran el fenómeno con claridad.
Una foto tomada por satélites de la NASA muestra claramente el cambio de coloración.
"Este organismo particular está recubierto por carbonato de calcio blanco y, cuando está presente en grandes cantidades, tiende a darle al agua un brillo blanquecino", explicó la NASA.
No todos tienen el mismo efecto. Las diatomeas, por ejemplo, que también pueden aumentar repentinamente en el Mar Negro, tienden a oscurecer el agua y no a aclararla.
Emiliania huxleyi es una especie de cocolitóforo de distribución global y uno de los organismos más exitosos del planeta.
Su increíble adaptabilidad le permite prosperar en aguas desde el Ecuador hasta regiones subárticas.
Si bien cada microorganismo vive apenas unos pocos días, estos inmensos mantos de fitoplancton pueden permanecer en el agua por semanas.
Manuel acostumbra a jugar dominó en los muelles de Lagunillas. También echa chistes, muchos, aunque debería estar en el Lago de Maracaibo extrayendo petróleo. No puede laborar.
"No hay suficientes lanchas que nos lleven a todos hasta las gabarras. Muchísimas veces solo cumplimos horario", admite, implorando que se reserve su verdadera identidad.
Él, personal activo de una filial de la empresa estatal PDVSA, vive en una de las zonas petroleras más ricas de Venezuela, la nación con las mayores reservas de hidrocarburos del mundo.
Y en los cinco municipios de la llamada Costa Oriental del Lago (COL) se produce la tercera parte de todo el crudo de la nación.
Son suelos acaudalados. En ellos, se erigió en 1914 el primer pozo activo en territorio venezolano: el Zumaque 1 o MG-1. Tienen más de 100 años familiarizados con la explotación petrolera.
Cuando Venezuela producía más de tres millones de barriles de crudo por jornada, esos distritos de occidente regurgitaban hasta 1,2 millones de unidades del llamado oro negro en tierra y agua: 850.000 correspondían a empresas nacionales
Hoy, apenas rondan las 600 mil, según cifras de la Asociación de Comerciantes e Industriales de Lagunillas.
El desplome ha sido paulatino. Y su génesis tiene fecha.
Trabajadores, empresarios, comerciantes y ciudadanos de a pie recitan en coro el día en que, para ellos, empezó del descalabro: 8 de mayo de 2009.
Ese día soleado, de mar manso y brisa fresca, sobraban sonrisas entre el personal en los atracaderos.
Centenares de militares ya habían ocupado en la madrugada los activos de 60 empresas privadas del sector cuando, al final de la mañana, el presidente Hugo Chávez descendió de la lancha "Canaima" en el muelle Terminales Petroleros.
El excomandante pasaba por una fiebre expropiatoria: entre 2007 y 2010, nacionalizó empresas de servicios eléctricos, de telecomunicaciones, decenas de miles de hectáreas de siembra y plantas procesadoras de alimentos, puertos regionales, hoteles y bancos.
En Lagunillas embriagó a los presentes con su candidez y carisma, proclamando la estatización de contratistas y compañías tercerizadas de PDVSA.
Derechos de autor de la imagenMINISTERIO DE COMUNICACIÓN DE VENEZUELAImage captionUna ley aprobada por el Parlamento -entonces de mayoría chavista-, reservó al Estado los bienes y servicios de las actividades primarias de hidrocarburos.
Así se lo permitió una ley aprobada por el Parlamento -entonces de mayoría chavista-, que reservó al Estado los bienes y servicios de las actividades primarias de hidrocarburos.
El Gobierno confiscó gabarras, grúas, diques astilleros, plataformas JackUp, lanchas de buceo y remolcadores.
Expropió en las siguientes semanas un total de 143 empresas, mil embarcaciones y 39 muelles, según cifras oficiales.
A la mayoría de las compañías, PDVSA adeudaba ocho meses de pagos.
Doloroso". Así vivió el 8 de mayo de 2009 José Contreras, gerente de De-Ko Construcciones.
A las 4:00 de la madrugada, un vigilante le llamó para advertirle que un tropel de trabajadores se aglomeraba frente a la compañía.
Llegó a los portones aún entre la penumbra. Vio el gentío. Alfredo González, quien se identificó como representante de Petróleos de Venezuela, le notificó que ejecutaba una ley de extenso nombre.
El funcionario vestía una braga roja. El mismo color de la segueta que tenía en su mano. Con ella, pensaba romper el candado de las protecciones.
"Fue un viernes rojo", recuerda.
Se sentó en su oficina durante dos horas. Solo miraba al techo. "Me sentía desolado".
La empresa, con 50 años de experiencia en el tramo de mantenimiento y construcción de la industria petrolera e industrial, fue una de las 35 ocupadas solo esa madrugada.
Cinco soldados armados con fusiles rusos ingresaron a las instalaciones a las 6:00 de la mañana. Los trajeados de rojo ya sumaban un centenar.
Derechos de autor de la imagenGUSTAVO OCANDO ALEXImage captionSindicalistas del chavismo admiten la falta de mantenimiento de equipos en las instalaciones petroleras del Lago de Maracaibo
Le obligaron a aceptar en público el acta de rendición de la compañía. Las secretarias le hacían gesto de negación a Contreras.
"Tuve que firmar, so pena de cárcel".
La estatal se hizo de un plumazo con las nueve lanchas, cuatro remolcadores gigantescos, cuatro gabarras grúas y 400 máquinas de soldar de De-Ko Construcciones.
El muelle tuvo nuevo nombre: "Che Guevara".
"Fue un asalto a mano armada. Ese día supe con qué se comía el socialismo".
"Nefasto"
Ocho años después, la mayoría de los trabajadores consultados no se ahorra epítetos inexorables para la "nacionalización" de los capitales privados: "Caos", "desastre", "nefasto".
El presidente de la Asociación de Comerciante e Industriales de Lagunillas, Luis Soto, subraya que las compañías afectadas aportaban el 40% de la recaudación nacional de impuestos como contribuyentes especiales.
"Esa cantidad de dinero no cabía en una calculadora" dice.
La Federación Única de Trabajadores Petroleros de Venezuela resume las expropiaciones en un expediente negativo: solo en Lagunillas, había 47 barcazas operativas en 2009 y ahora solo funcionan cuatro; nada más están activos 19 de 130 buses de transporte del personal y el 70 % de las estaciones de servicio no tienen gasolina ni gasoil.
Según ese sindicato, 100.000 personas resultaron afectadas.
Su secretario general, Iván Freites, denuncia que los empleados de las filiales pasan hambre. "No ganan ni lo suficiente para comerse un huevo al día".
Jairo Sibada, sindicalista de Lagunillas, revela que sus compañeros deben hacer una colecta de su propio dinero para comprar brochas de pintura o repuestos para las camionetas.
Lo curioso es que Hugo Chávez adujo exactamente lo mismo para justificar sus confiscaciones: "Ellos mismos de sus bolsillos han tenido que poner plata para reparar las lanchas, para pagar la comida, las medicinas".
Lo dijo entre vítores.
Derechos de autor de la imagenGETTY IMAGESImage captionEl Gobierno confiscó gabarras, grúas, diques astilleros, plataformas JackUp, lanchas de buceo y remolcadores.
Chávez prometió que lo expropiado sería "propiedad del pueblo". Dijo que no habría más "explotación laboral de los capitalistas".
También calculó que su Gobierno se ahorraría 700 millones de dólares al año por la reducción de 20% de los costos operativos.
Rafael Ramírez, titular máximo de PDVSA en esos tiempos, se mostró alérgico a que la empresa fuese "un nido de escuálidos", alias concebido por Chávez para sus detractores.
Nicolás Maduro, jefe del Estado venezolano, insistió en esa fórmula en marzo de este año durante un acto oficial: "Esta es la revolución obrera que necesita Venezuela, no seguir dependiendo de empresarios corruptos o transnacionales, que traicionan a la patria siempre".
La reputación de la estatal, mientras, está enlodada por supuestas fallas en su flujo de caja.
Calificadoras internacionales de riesgo, como JP Morgan, advirtieron el año pasado de un inminente default. En mayo, el Gobierno vendió a Goldman Sachs 2.800 millones de dólares en bonos de PDVSA a precio de vaca flaca mediante un intermediario en el Caribe.
Los que defienden la expropiación
Eulogio Del Pino, presidente de PDVSA hasta hace dos semanas, negó que haya tufo de insolvencia. "Es totalmente falso", remarcó en noviembre pasado.
Y en la industria muchos defienden el plan, como Elbano Sánchez, presidente de la Federación Bolivariana Socialista de Trabajadores del Estado Zulia y marino petrolero en Cabimas, celebra la "renacionalización" de los activos de la COL.
"Se acabó la tercerización de los trabajadores. Ahora gozan de beneficios como la caja de ahorro y el plan de vivienda. Participamos de las discusiones que hay en la empresa", aduce.
Derechos de autor de la imagenGETTY IMAGESImage captionPDVSA, que tiene el control de todas las operaciones, reconoce la deuda en el apartado del mantenimiento.
Otro plus es que PDVSA tiene el control de todas las operaciones, agrega. Sin embargo reconoce la deuda en el apartado del mantenimiento.
"La capacidad de respuesta es más lenta. Ahora tenemos que ir a procesos de licitaciones internacionales y esas lanchas expropiadas eran viejas".
El presidente de PDVSA, Eulogio Del Pino -quien se retiró del cargo para aspirar a la Asamblea Nacional Constituyente-, reconoció los "muchos errores" de la estatización en el Lago de Maracaibo durante la Asamblea General de la Cámara Petrolera de Venezuela de 2016.
A esos empresarios les dejó abierta la puerta. No descartó que regresaran a las operaciones con "otro modelo".
BBC Mundo le solicitó a la oficina de Gestión Comunicacional del Ministerio de Petróleo su versión sobre las expropiaciones pero no obtuvo respuesta.
Esperanza tras el arrebato
Los "privados" caminan en puntillas cuando hablan de sus expropiaciones. Cuidan que ninguna declaración perjudique sus indemnizaciones y negociaciones con el Gobierno.
Filtran sus opiniones a través de un conglomerado que representa la abogada Mercedes Caridad.
Ella expuso ante la Comisión Permanente de Energía y Petróleo de la Asamblea Nacional que la ley de 2009 tuvo un efecto pernicioso.
"Esa norma incrementó los pasivos laborales de PDVSA al asumir a 12.000 trabajadores en las áreas de operaciones acuáticas y 4.500 en la filial de diques y astilleros".
Criticó la disminución de la producción petrolera "por falta de unidades lacustres por su deterioro, por la falta de mantenimiento preventivo, generando nuevos contratos y la compra de nuevos equipos".
Derechos de autor de la imagenGETTY IMAGESImage captionEn los cinco municipios de la Costa Oriental del Lago Maracaibo se produce la tercera parte de todo el crudo de la nación.
El grupo argumentó en una carta abierta al presidente Nicolás Maduro, publicada este mayo, en el octavo aniversario de las expropiaciones, que el Estado solo ha indemnizado a 11 de las 143 empresas.
Exigen celeridad en el plazo de cumplimiento de acuerdos y expresan su voluntad de reactivarse como empresarios en los procesos petroleros, una vez cancelados sus pagos.
Hoy no solo apelan a la prudencia. La esperanza también les ronda en puntillas.
Quiebra y miedo en masa
Uno de los empresarios perjudicados ventiló su drama bajo condición de anonimato. Expresó su miedo de hablar on the record.
Denunció que vivió "acoso y presiones psicológicas" hace ocho años. "Las noches se volvieron interminables, agotadoras. Nuestras familias quedaron desamparadas".
Funcionarios corruptos habrían desatado, según su versión, "una caza en jauría" a empresarios que estuvieran dispuestos a pagarles prebendas a cambio de no incluirlos en las listas de potenciales expropiados.
José Luis Parada, gerente de PDVSA Occidente al momento de las expropiaciones, fue arrestado y acusado cinco años después por liderar una red de corrupción del sistema de distribución de combustible.
El empresario refirió que en la COL desaparecieron los comercios, restaurantes, clínicas, colegios y talleres mecánicos que se beneficiaban de manera indirecta de la actividad petrolera en las cercanías de los muelles.
"¡Quebraron hasta los bares de prostitución!".
Desveló que PDVSA tendría la estrategia de negociar individualmente con cada empresa para dividirles como grupo.
"Es como quien viene a pagarte una mercancía que te robó hace ocho años".
Para más de 12 millones de personas se trata de él, del maestro, Bruce Lee.
La definición no es tan clara y resulta imposible identificar su rostro, cubierto por un protector de cabeza, pero la sutileza de sus movimientos y lo contundente de sus golpes delatan que se trata del legendario actor que inmortalizó las artes marciales en la gran pantalla.
Pero lo más llamativo del video que se hizo viral esta semana, publicado por uno de sus aficionados en YouTube, es que en él se observa a Lee en un combate que no es de ficción.
Sin embargo, este jueves el video fue bloqueado en la cuenta de Beerdy: Bruce Lee Centralpor YouTube debido a un reclamo interpuesto por la empresa Bruce Lee Enterprises, LLC, la compañía encargada de proteger el legado del legendario actor.
Hasta ahora no se conoce una información oficial de Bruce Lee Enterprises, LLC sobre el la veracidad del video .
El youtuber Beerdyaseguró en el momento de subir el material que se trata de la única grabación del maestro de artes marciales en una pelea real.
"Él está peleando contra Ted Wong, uno de sus mejores estudiantes", explicó Beerdy.
"Están usando protectores porque no estaba permitido pelear sin ellos. Esas eran las reglas en ese momento. Si no hubiera sido por esas reglas te puedo garantizar que Bruce hubiera peleado descubierto".
Derechos de autor de la imagenGETTY IMAGESImage captionBruce Lee murió a los 32 años, pero la popularidad de sus películas hace que incluso su estatua de cera sea venerada por sus admiradores.
En el video, que se calcula tiene unos 50 años, aparece Wong en constante movimiento tratando de atacar a su maestro, quien sin aparente esfuerzo lograr reducir la ofensiva de su oponente y lo castiga enviándolo a la lona en repetidas ocasiones.
Ambos parecen aplicar el método de pelea que patentó Lee, basado en atacar cuando tu oponente intenta golpearte.
Wong nació en Hong Kong, pero emigró a Estados Unidos junto a sus padres cuando todavía era un adolescente.
Tras quedar cautivado por una charla de Lee en 1967, Wong se convirtió en uno de sus principales pupilos hasta el punto de ser uno de los máximos exponentes del Jeet Kune Do, el estilo que popularizó Lee y que además fue reflejo de su filosofía de vida.
La imagen es tan surrealista que, a primera vista, parece un montaje.
Sin embargo, para los habitantes del suroeste de Marruecos se trata de algo habitual.
Desde hace años que están acostumbrados a ver paradas sobre las ramas de los árboles de argán (Argania spinosa) a cabras de distintos colores y tamaños.
En esta zona de clima seco, estos árboles son la única fuente de alimentación en determinadas estaciones del año.
Y, sin más que comer, las cabras no tienen otra opción que trepar.
Aprendizaje
Aunque son hábiles escaladoras, no nacieron sabiendo subirse a los arganes, que pueden llegar a crecer hasta una altura de 8 o 10 metros, sino que aprendieron en sus primeros meses y años de vida.
Derechos de autor de la imagenGETTY IMAGESImage captionEn algunas estaciones del año, las hojas y frutos de los árboles de argán son los únicos pastos verdes que tienen para comer.
Sus cuidadores les enseñan hasta que aprenden a hacerlo por sí mismas.
Ellos también se encargan de podar los árboles, para que les resulte más fácil la tarea.
Las cabras, los árboles y los cuidadores se benefician mutuamente, sobre todo si el rebaño es reducido.
Semillas regurgitadas
El árbol de argán es importante para la economía de la región. Da un fruto de cuya semilla se extrae el aceite de argán, muy valorado por sus propiedades por la industria cosmética.
Las cabras ayudan a sus cuidadores bajando los frutos de las ramas altas de los árboles.
Derechos de autor de la imagenGETTY IMAGESImage captionEs una vista tan inusual que los turistas siempre paran a sacarles fotos.
Y, según un nuevo estudio de la Estación Biológica de Doñana en Sevilla, España, las cabras comen los frutos, regurgitan las semillas y las dispersan en el suelo.
Esto contribuye a la reproducción de la planta y también proporciona semillas a los cuidadores que las venden para la producción de aceite.
Anteriormente, se pensaba que las cabras defecaban las semillas, pero según los investigadores españoles, estas son demasiado grandes y por eso las regurgitan en vez de tragarlas.