Unos 8.000 años atrás, el mundo tenía un
área boscosa de aproximadamente 6 millones de hectáreas. En la actualidad,
los bosques del mundo cubren aproximadamente 4 mil millones de hectáreas,
equivalentes al 30% de su superficie. No más de la mitad de esta área está
cubierta por bosques maduros, intactos, anteriormente conocidos como bosques
primarios.
Mientras tanto, dos tercios de los 4 mil millones de hectáreas
de bosques se concentra ahora en sólo 10 países: Australia, Brasil, Canadá,
China, la República Democrática del Congo, India, Indonesia, Perú, Rusia y los
Estados Unidos de América. Tres de estos países-Rusia, Canadá y Brasil,
son el hogar del 70% de la superficie actual de bosques maduros, intactos.
En el siglo XXI, los bosques del mundo se encuentran
todavía en situación de riesgo y continúan siendo destruidos. La tala
ilegal y la quema de árboles en gran escala es un hecho cotidiano y es la
principal causa de la desaparición de nuestros bosques. De hecho, la
deforestación (tala de bosques) y degradación (reducción de la calidad de los
bosques) se traducen en una pérdida anual de unos 15 millones de hectáreas de
bosques en todo el mundo: representa casi el 0,5% del bosque que cubre la
Tierra.
Aceleración de la deforestación Tal es equivalente a la
desaparición anual de un área más grande que Inglaterra, Gales e Irlanda del
Norte juntas. En términos más simples, se calcula que cada dos segundos,
el equivalente a la superficie de un campo de fútbol se destruye, un ritmo muy
alarmante de deforestación.
Los bosques tropicales se encuentran entre los más
amenazados en el mundo.La desaparición anual de millones de hectáreas de
bosques en América Latina, el Caribe, África y el sudeste asiático sigue siendo
una dura realidad. De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas
para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el Centro Latinoamericano y las
regiones del Caribe todavía tienen abundantes recursos forestales: el 47% de su
territorio está cubierto por ellos.
Esto representa el 22% de la superficie
forestal mundial estimada en 2005. En América Latina y el Caribe, la tasa
de variación anual de la superficie forestal desde 2000 hasta 2005 fue -0,51%,
mientras que en los años noventa fue -0,46%.Entre 1990 y 2005, América Latina y
el Caribe perdió cerca de 64 millones de hectáreas de superficie forestal. Durante
este período, la superficie forestal disminuyó del 51% al 47% de la superficie
total de la tierra en esta región. Sin embargo, la superficie forestal
aumentó en un 11% en el Caribe, mientras que disminuyó en un 19% en América
Central y el 7% en América del Sur. En el Caribe insular, única área
boscosa de Cuba aumentó entre 2000 y 2005.